Hechos históricos que no hubieran sido posibles sin la topografía
¿Qué tienen en común la referencia catastral que debes incluir en tu declaración de IRPF y la altura oficial del Everest? Pues que ambos datos se han obtenido gracias a la existencia de esta disciplina a la que nos dedicamos desde hace tanto tiempo: la topografía.
Si hoy conocemos muchas realidades y se han podido llevar a cabo muchos descubrimientos a lo largo de la historia ha sido gracias al papel de la topografía y a sus diferentes herramientas perfeccionadas con los años. Y hoy nos gustaría hacer un repaso por alguno de esos momentos claves de la historia en los que la topografía ha jugado un papel fundamental.
Un poco sobre la historia de la topografía.
El origen de la topografía se remonta al año 1400 a.C. cuando la civilización egipcia comenzó a utilizar esta disciplina para realizar algunas de sus impresionantes construcciones. Aunque el gran uso vendría cuando el río Nilo arrastró las marcas que delimitaban los lotes en los que se dividían las tierras para pagar impuestos. En ese momento, se recurrió a la topografía para redefinir los linderos y restablecer los lotes asociados al pago de tributos. Un momento clave que dio el pistoletazo de salida al uso de la topografía.
Las civilizaciones griegas y romanas fueron las siguientes en hacer mucho uso de esta ciencia que aplicaron tanto a sus estudios físicos y geográficos, pero sobre todo a la construcción de nuevos instrumentos de medición y al perfeccionamiento de sus cálculos para realizar sus colosales construcciones como vías y acueductos.
A partir del siglo XII, la topografía dio un gran salto, sobre todo en lo que se refiere a la creación de nuevos instrumentos para estudiar las dimensiones terrestres, algo que también hizo posible la invención del telescopio, los logaritmos y los métodos de triangulación (1631) por parte de Henry Briggs. Estos descubrimientos se introdujeron en España en la Edad Media a través de tratados árabes. Sin duda, han sido los cimientos para la actual recreación del levantamiento de figuras triangulares a partir de la medición exclusiva de sus ángulos.
En los siglos XVII, XVIII y XIX la topografía avanzó muy rápidamente por la creciente necesidad de tener mapas precisos y establecer fronteras entre países, dando lugar a una disciplina mucho más evolucionada y al desarrollo de la cartografía.
Aunque sin duda, el punto álgido de su evolución en estos años vendría poco después de la mano de dos hechos históricos terribles: la Primera y la Segunda Guerra Mundial. Estos procesos bélicos, más los que vendrían posteriormente a menor escala, hicieron que la técnica topográfica se perfeccionara mucho más, especialmente para crear mapas y establecer estrategias de defensa.
Acontecimientos históricos unidos por la topografía.
Ahora que sabemos un poco sobre la historia de la topografía, ¿quieres descubrir cómo ha estado presente en acontecimientos históricos muy dispares y por motivos bien distintos?
Por ejemplo, como te contamos en este post sobre el uso del láser escáner topográfico en la rehabilitación patrimonial, la reconstrucción de la Catedral de Notre Dame tras el incendio que la asoló en 2019 no hubiera sido posible sin esta herramienta y el trabajo de topógrafos expertos en su manejo. El escaneado de la catedral permitió crear modelos tridimensionales muy precisos además de aportar información extremadamente valiosa de ciertos aspectos arquitectónicos para su reconstrucción.
Otro ejemplo, ¿sabías que el Everest es conocido como la montaña de la topografía, además de que su nombre fue elegido en 1865 en honor precisamente de un topógrafo? La primera medición del Everest fue llevada a cabo en el contexto del Gran Proyecto de Topografía Trigonométrica que los británicos iniciaron en la India en 1802 y que duró casi todo el siglo XIX, identificando y midiendo las tres montañas más altas de la Tierra. Pero hace tan solo unos años, un equipo de 53 topógrafos pertenecientes a la Primera Brigada de Topografía Geodésica de China volvió a los pies de la vertiente norte del Everest con el objetivo de medir una vez más una serie de parámetros de la montaña más alta del mundo. La altura del Chomolungma, hoy en día aceptada en 8.848 m gracias a la colocación de una antena GPS en la cima, fue el dato más mediático que arrojó su investigación.
Y así podríamos seguir con cientos de ejemplos en los que la topografía ha jugado un papel trascendental en el devenir de la historia y en el hecho de que hoy conozcamos muchos datos que serían imposibles de saber sin esta disciplina a la que nos dedicamos con pasión y profesionalidad en Grupo Trato.